Palabras del Secretario de Desarrollo Social de la Ciudad de México, José Ramón Amieva Gálvez, durante la ceremonia de promulgación y publicación de reformas a diversas leyes en materia de Desarme Voluntario en la CDMX

Muchas gracias, muy buenas tardes para todos y para todos, con su permiso señor Jefe de Gobierno.

Quiero iniciar compartiéndoles una experiencia que es gratificante para el corazón y lo que significa servir en esta ciudad y lo que significa trabajar bajo las instrucciones, bajo el mando, bajo la conducción y bajo la tutoría del Doctor Miguel Ángel Mancera Espinosa.

Cuando llegó el Doctor Miguel Ángel Mancera Espinosa, los primeros meses, nos llamó a la doctora Rosa Icela -aquí presente- y a su servidor a su oficina y se sentó y hay momentos, hay espacios que el Jefe de Gobierno hace las cosas de manera directa, muchos de ellos han sido los acuerdos, los decretos, las iniciativas de ley que ahora las tenemos dentro del Marco Normativo de la Ciudad.

El Doctor Mancera se puso a redactar un programa que se denominaba “Por tu familia, Desarme Voluntario” y ya que lo redactó nos dio las instrucciones para que se persiguieran diversos objetos; el primero era recoger las armas de fuego de todas las casas de la ciudad, esas armas de fuego que no eran regulares en cuanto a su tenencia, pero que la gente no sabía qué hacer con ellas y quería, obviamente, evitar un peligro para quienes están en la casa.

Segundo que no criminalizáramos a nadie por tener un arma de fuego, él nos señaló “hay personas que lo reciben de la herencia del abuelito, ha sido un empeño que nunca pagaron y se quedaron con el objeto, que era un arma de fuego, por curiosidad, no vamos a criminalizar a nadie, es un principio de buena fe”.

El tercer punto fue que no solamente recogiéramos las armas de fuego, sino que trabajáramos mucho con las niñas y con los niños para ir inculcando que la cultura de paz y la convivencia social efectiva se da desde las generaciones actuales para decidir la forma de vida de las generaciones venideras en esta ciudad, y así fuimos, lo firmó, consiguió los recursos económicos y semana tras semana, desde aquel momento, hemos estado recorriendo todas las delegaciones a través de los atrios de la Iglesia.

Y quiero mencionarlo porque además de estas instrucciones que nos dio el Jefe de Gobierno, nos dio como una estafeta, yo le llamaría como una buena vibra, como un mensaje de paz que nos infundió a nosotros y a todas y todos los compañeros que aquí estamos para acudir a esas jornadas y que lo pudiéramos transmitir a la ciudadanía.

Y este mensaje de paz inició con la confianza de acudir, antes llegaban con unas bolsas negras enormes, y el Jefe de Gobierno ha estado en varios eventos, le tocó incluso destruir un arma con la sierra de la Secretaría de la Defensa Nacional, y se empezaron a recibir armas cortas, armas largas, balas de mortero, granadas activas, fusiles semiautomáticos, todo eso se empezó a recibir, y semana tras semana, todas y todos los compañeros estuvieron presentes; el DIF apoyando con los juguetes para la entrega o sustitución de juguetes bélicos por juguetes educativos y didácticos; el Consejo Ciudadano y Locatel a través de la promoción; la Secretaría de Seguridad Pública a través de sus armeros y con los recursos necesarios; la Secretaría de la Defensa Nacional para la certificación y la destrucción, y se fue formando.

Después, el Jefe de Gobierno inició una política muy importante que fue “retiremos las armas como objetos peligrosos de una sociedad”; dio origen a una iniciativa que ahora es Ley, el disparar un arma de fuego en esta ciudad sin tener una razón para hacerlo, es delito. Nos pidió que nos acercáramos a las diputadas y diputados; aquí está el diputado Romo, que fue quien promovió esa iniciativa; al diputado Luna, a todas y todos los diputados aquí presentes para que se convirtiera en Ley, pero además pidió que reforzáramos esa iniciativa, que corresponde a la Federación, sobre la portación de armas de fuego no reservadas a las fuerzas policiales y al Ejército, porque genera el mismo daño un calibre grande que un calibre pequeño, esa es la intención.

Tras esto, pues obviamente hemos contado con aliados importantísimos; el ingeniero Cárdenas ha llevado este programa ante las más altas instancias internacionales. Como ustedes saben, el ingeniero Cárdenas, desde la construcción y sede de OPANAL, es un organismo internacional que precisamente evita la proliferación de las armas nucleares en este continente americano y en todo el mundo, solamente ha sido reflejo de cultura de paz nuestro Programa de Desarme Voluntario.

Ya hemos estado en muchos países y hemos recibido muchísimos reconocimientos, porque esta vibra que se transmitió de paz se sigue llevando a cabo. Y después el señor Jefe de Gobierno dijo “¿qué vas a hacer con tanto deshecho ferroso –que es el termino–”.

Pedimos que ese deshecho ferroso fuera donado por la Secretaría de la Defensa Nacional y acudimos a alguien que tiene el talento, que tiene la creatividad, que tiene la sensibilidad y que ha generado un símbolo de identidad de esta ciudad y de este país que son las alas y construyó nuestras alas de la paz; y quiero dar un mensaje porque de verdad a veces enoja un poquito que todo el mundo esté diciendo en qué se ocupa nuestro presupuesto y el maestro Marín no cobró ni un solo peso por la elaboración.

Y gracias a la promoción del maestro Werman, a la hospitalidad que la maestra Sharon y, obviamente, nuestro Magistrado Presidente ha logrado, pues aquí están estas alas, aquí está este mensaje.

De verdad, señor Jefe de Gobierno muchas gracias por habernos transmitido esa vibra, todo lo que ven aquí los niños, las personas que somos parte de su equipo, todos quienes estamos aquí, lo seguimos teniendo y continuaremos por esa acción de retirar las armas de las casas.

Y simplemente, decirles que es tanta esta magia, esta buena vibra que hoy me tocó presenciar una forma inédita de una develación, porque se tenían los botones para hacer la develación y de pronto, yo creo que fue tanto la vibra y la parte mental que automáticamente se develaron las alas, tenían que salir.

Entonces, yo lo que creo, es que se han convertido, a través del retiro de estas armas y esta promulgación de ley, de modificaciones a la ley, en súper héroes y súper heroínas, que a través de poderes mentales hicieron que esas alas se develaran.

Yo por ahí vi a un superman, vi a muchos superhéroes y muchas superheroínas que trabajan de manera cotidiana por las niñas, los niños y por todas y todos en esta ciudad.

Muchas gracias por el favor de su atención.